NOMBRE: CARLOS
APELLIDOS: GARCIA FERNANDEZ
CARGO EN EL CLUB: COORDINADOR DE LA ESCUELA. ENTRENADOR 2º EQUIPO Y DEL INFANTIL FEMENINO B-C
-¿Cómo está viviendo el entorno esta situación? ¿Y tú personalmente?
Creo que la gente se ha adaptado por resignación, no nos quedaba otra. Sé que los entrenadores están enviando tarea a los equipos, sobre todo, los más mayores, pero a medida que ha pasado el tiempo, y en vista que la temporada se va a cancelar, es complicado mantener las mismas ganas que al principio. De todas formas creo que la gente se ha implicado mucho y está trabajando. Ahora nos dejan salir a correr, seguro que no lo vamos a desperdiciar y vamos a aprovecharlo.
Yo me vine a Gijón el viernes que estalló todo. El jueves ya no entrenamos con el primera nacional, y al día siguiente después de la reunión de AEDONA, se decidió suspender todos los entrenamientos, y que los clubes de la asociación cerrasen.
Yo estoy aprovechando para estar con la familia, algo que durante el año puedo disfrutar bastante poco, en eso he ganado mucho, aunque bien es verdad que tenemos suerte que la niña aún no es consciente de la cantidad de días seguidos que ha estado sin salir de casa.
También estoy aprovechando para seguir formándome, y sacar adelante todo aquello que llevaba años queriendo hacer y nunca encontraba tiempo para ello. Me doy cuenta que si no llega a pasar esto, no sé cuando ni cómo iba a poder sacar adelante todo este trabajo… Estoy con ganas la verdad, me motiva hacer tareas que tenía pendientes desde hace años.
-Queremos conocer un poco más vuestro club; ¿Cuál es vuestra filosofía? ¿Qué objetivos os marcáis cada año? Si tuvieras que elegir una frase para resumir vuestro club, ¿cual sería?
La frase creo la más acertada es: educar por medio del balonmano. Anaita, fue, es y será una escuela de valores deportivos. La convivencia a lo largo de la semana en la sociedad es fantástica, los días que entrena la escuela de balonmano son días de mucho ambiente deportivo, de chicos y chicas que entran y salen, se quedan a verse unos a otros, pasan la tarde en Anaita, y eso es una suerte, porque se generan muchos vínculos y un gran sentimiento de club.
Lo mismo pasa con los entrenadores, es habitual verlos juntos en el bar, con los ordenadores, preparando entrenamientos, vídeos, programando… En fin, creo que estamos en un sitio privilegiado, como dije muchas veces. Anaita es para vivirlo.
Cada temporada nuestro objetivo es mejorar, y hacerlo de una forma global. Siempre hay que tener la idea de cómo se puede hacer mejor, y ser ambicioso en conseguirlo. Luego se podrá o no, pero esa es la idea.
-Llevas unos años en Navarra. ¿Hay diferencia en la forma de trabajar aquí y en Asturias?
Tiene muchas similitudes, región uniprovincial, un tipo balonmano muy parecido, la forma de ser de la gente… En mi etapa como seleccionador juvenil de Navarra, comenté que el momento actual de Navarra me recordaba a los mejores años de Asturias, sobre todo a nivel de selecciones. De todas formas, balonmano es balonmano, cuando se hace bien, normalmente las gestiones y las situaciones son muy parecidas.
Aquí el balonmano se concentra principalmente en la comarca de Pamplona, allí se concentra en el medio de la región, Gijón-Oviedo-Avilés. Quizás en los pueblos es donde Navarra suma más practicantes en comparación con Asturias, esto es crucial por muchas razones. Lo que hay en Navarra, no se puede perder.
-De este tiempo que llevas en Navarra, ¿con qué momento te quedarías a nivel deportivo?
Es muy difícil destacar uno en concreto, han sido muchos los buenos momentos que he vivido desde que estoy en Anaita, tanto de entrenador del 1ª nacional como de coordinador de la cantera.
Me satisface que las cosas salgan bien, a todos los niveles. Me motiva el crecimiento que veo de los entrenadores de Anaita, ayudarles, seguirles, estar encima, a veces corregirles… Cuando veo a un equipo del club que sigue a la perfección el modelo, veo a los chicos, chicas, y entrenadores del equipo motivados, me genera muchísima satisfacción, porque sé lo complicado que es llegar hasta ahí, todo el trabajo que no se ve, que está por detrás, implica muchísimas gestiones para que las cosas funcionen.
Me ilusiona siempre el 1ª nacional, creo que lo que estamos haciendo durante estos años no es fácil, equipo más joven de la categoría, siempre tenemos bajas temporada a temporada, y a pesar de todo mantenemos el nivel, me encanta entrenar con ellos y verles progresar y mejorar. Además este año he vuelto a entrenar un equipo de base, y he vuelto a revivir todos los años que estuve con pequeños, encima las chicas son fantásticas, y tienen una ganas tremendas.
Pero concretando en la pregunta, cómo salió la organización de la Copa de Rey que organizó Anaita, ver el nivel de juego al que llego el equipo juvenil femenino en la Zaragoza Cup de la generación 2000-2001, después de lo mal que lo habían pasado los meses anteriores, toda la temporada 2016-2017 con el primera, la clasificación para la fase final de las infantiles en el sector de Ascó, todos los torneos de Semana Santa, el Torneo del Ademar de la generación 1999-2000, en fin, concreto algunos pero como dije al principio son muchísimos momentos.
-Las ligas en Nacional se han dado por finalizadas, crees que es la mejor decisión?
Tal como se han dado las circunstancias era imposible otra solución. Y más en el balonmano. El fútbol seguro que puede jugarse por el verano, pero el resto de deportes, no podemos alargar los costes dos o tres meses más, eso era inviable por muchas vueltas que quisieran darle.
En base, la verdad, que aun tenia la esperanza que pudiéremos terminar a finales de junio, pero con el paso de las semanas, esta idea de fue diluyendo. Es una pena porque para nosotros esta temporada era muy ilusionante por muchos motivos, además de ser dos años de trabajo de muchos entrenadores que no han podido culminar, pero lo que está ocurriendo es muy excepcional. Como leí por las redes sociales, acabar la temporada “online”, es un desastre. Se tendría que terminar como acabamos siempre, una comida, una cena, y mucho de buen rollo, pero ahora mismo me conformo con empezar más o menos bien la temporada siguiente.
-La pandemia del COVID-19 también ha acarreado la suspensión del Torneo de Semana Santa que organizáis cada año. ¿Qué supone para vosotros?
Recuerdo que el lunes de la semana que se anunció el primer estado de alarma, tuvimos una reunión para decidir si hacíamos o no el torneo, y aun teníamos pequeñas esperanzas de poder organizarlo. El miércoles, recuerdo que salió la noticia de que se aplazaba la final de la copa del Rey de fútbol, que era un evento posterior a Semana Santa. En ese momento ya no había dudas. Se tenía que cancelar.
Muchísima tristeza. El ambiente que se respira en el torneo, la convivencia, deportividad y sana competitividad, es un escenario difícil de igualar. Para nosotros es lo mejor del año, aunque nos lleve muchísimas horas de trabajo, y mucha implicación de toda la sociedad, merece la pena el esfuerzo, sin duda. Solo nos queda, afrontar con más ganas si cabe, la edición de la temporada que viene.
-¿Cómo ves el balonmano en Navarra? ¿Qué ves que se pueda mejorar?
Esta claro que se han mejorado muchas cosas, solamente hay que ver los resultados de selecciones y de los clubes, que aunque no son decisorios, sí que son un buen indicador de si las cosas están funcionando o no, y lo están. Esto es gracias al trabajo incansable de todos los clubes, esta claro, pero también tiene mucha culpa la federación. Creo que sería acertado decir, que es un trabajo en equipo de todos.
Siempre soy muy insistente, creo que lo fundamental son los entrenadores, y su formación. Con esto tienes balonmano, tienes jugadores/as, tienes equipos, tienes competición, tienes a medio plazo, más entrenadores y árbitros, y a largo plazo, directivos. Así lo entiendo.
Hay que seguir reforzandoles, animándoles, formándoles, en esto la Federación ha estado muy bien en los últimos años, pero hay que seguir. El tema de los cursos de nivel I y II ahora mismo es un problema que hace falta que se solucione lo antes posible. Desde que se declaró el estado de alarma, la gente de nuestro deporte se ha movido y ahora mismo hay un aluvión de cursos, charlas y clinic online. Al menos, esto quedará para bien, es una manera de formarse cómoda y fácil, cuando muchas veces, presencialmente, no podemos acudir. Es una fantástica oportunidad que espero quede cuando ya todo vuelva a la normalidad.
Es muy comentado en estas entrevistas el equipo femenino en máxima categoría. Creo que llegará, pero pienso que no se ha empezado con buen pie. Es importante que las escuelas sigan formando jugadoras como lo están haciendo, y sigan saliendo hacía arriba, y sobre todo, sigan jugando en Navarra.
También es importante ser conocedor de la casuística de cada club, que dificultades y problemas tienen, como se les puede ayudar… Cada vez que una escuela se cae, o flaquea en número de participantes o baja el nivel, la región lo resiente muchísimo, hay que intentar que no suceda, aunque muchas veces es difícil, porque muchos clubes dependen en muchos casos de una o dos personas, y si estas, por las circunstancias que sean, lo dejan o se cansan, el club se cae. Que las cosas salgan bien y funcionen es un trabajo de muchos años, empujando y trabajando, pero que se vaya todo al garete, son 4 meses. Esto es muy fácil decirlo, pero muy complicado plasmarlo y, al final, a todos nos come el día a día.
Navarra, hoy por hoy, goza de buena salud, de muy buena, pero mi forma de pensar es que nunca hay que confiarse ni relajarse, cuando todo va bien, vamos a pensar cómo podemos hacerlo mejor.
Aprovecho estas lineas para mandar ánimos a todos los clubes, se echa mucho en falta nuestro querido balonmano, nuestra gente. A ver si salimos lo mejor posible de todo esto y al menos, aunque sea la temporada que viene, nos volvamos a ver todos.