Hace aproximadamente dos meses se producía en la localidad gallega de Sanxenxo una agresión al abuelo de un árbitro de 16 años que terminaba con Andrés Rico, el abuelo, en un centro hospitalario víctima de una grave contusión craneal que le producía un coma cerebral. Tras dos meses en la UCI, desgraciadamente ha fallecido víctima de la lesión cerebral.
Todo esto nos leva a una profunda y dura reflexión sobre el comportamiento, cada vez más habitual, en los recintos deportivos y, concretamente, en nuestro deporte. Estas actitudes violentas no tienen razón de ser en ninguna circunstancia y mucho menos en deporte base. Los espectadores, ya sean familiares y/o aficionados, deben velar por los principios básicos del respeto y las buenas formas, pero sobre todo han de ponerlos en práctica en todo momento.
No podemos permitir estas actitudes y desde estas líneas animamos a denunciar estas situaciones, siempre sin entrar en el juego del violento, intentando hacerle ver que esa actitud solo lleva a episodios como el que estamos comentando. Desde el Instituto Navarro del Deporte y la Federación Navarra de Balonmano se sigue desde hace unos años un programa de Valores en el Deporte por el que personas vinculadas al balonmano (y otros deportes) acuden los sábados a partidos de deporte base con el fin de observar y, en su caso, mediar en conflictos antideportivos que se puedan producir tanto en los participantes como en el público asistente, por lo que os animamos a colaborar con esos Delegados de Valores.
En definitiva, hay que denunciar con claridad estas actitudes y erradicar entre todos a los violentos de nuestro deporte. Ya hemos visto el nefasto resultado de esta agresión en Sanxenxo provocada por un padre que perdió los papeles.
Por todo ello, a lo largo de esta jornada se guardará un minuto de silencio en todas las categorías en memoria de D. Andrés Rico y en contra de todo tipo de violencia en el deporte.
Como dicen en Galicia ¡NUNCA MAIS!
